sábado, 31 de octubre de 2020

 




RECORDANDO EL SANGRIENTO VERANO DE 1938 EN LA MALLASTA (Mallaeta)


Muntanyes de la Guerra volvió a salir a la Sierra Espadán el domingo día 25 de octubre de 2020 y esta vez lo hizo muy cerca de casa, concretamente en el término de Alfondeguilla, donde se ubica uno de los lugares más emblemáticos y espectaculares de la Sierra: el Castillo de Castro, flanqueado por el norte por la imponente “Mallaeta”.

Fue en estas cumbres donde tuvieron lugar algunas de la Batallas más sangrientas de la Guerra Civil durante el verano de 1938.

El estudio de estos sucesos nos llevó a visitar la zona en otro espléndido día de octubre en una marcha que iniciamos Joaquín, Fernando, Manolo, José Antonio y Ernesto,  antes del amanecer desde Alfondeguilla por la pista que nos conduce a la conocida “Fonteta de Marc” donde comienza la senda por el barranco de Eslida y que sin duda fue una zona de acceso y abastecimiento a las posiciones que íbamos a ver.


Iniciando el ascenso por el Barranco de Eslida


La senda nos lleva cuesta arriba de forma constante entre Alcornocales y la vegetación típica de Espadán, cruzando espectaculares "pedregals” y descubriendo magníficas vistas del Yosti y La Costera, la otra barrera natural que nos separa de Artana.


Al fondo la Costera y Yosti


Imponentes "Pedregals"

Refugio en la Mallasta

Llegados al cruce con la senda que desciende al “Coll Roig” tomamos la dirección a la izquierda y en ascenso, que nos llevará a la pista de la Nevera. Una vez en ella, volvemos a desviarnos a la izquierda por una confusa  y  empinada senda que nos lleva al inicio (por el oeste) de lo que se conoce como la Mallaeta y que en la nomenclatura de la Guerra Civil se denominaba “La Mallasta”, término que utilizaremos a partir de ahora.


Vista desde el interior

Todavía hoy se pueden contemplar los cráteres causados por los impactos de la artillería así como trincheras, algún refugio excavado en la roca con algunos metros de galería que dan una idea de lo que era estar allí en aquellas circunstancias.

Momento especial cuando llegamos a la posición 50, sin duda el lugar más relevante y por el que se batieron ambos ejércitos el 25 de agosto y en el que aprovechamos para almorzar, descansar y comentar  los hechos.




La boca del refugio apenas se aprecia a simple vista



Fernando, Ernesto y Jose Antonio, en la cota 50, al fondo el pico "Nevera"


“El 7 de julio de 1938 todo el macizo al norte del Castillo de Castro (Mallasta y Femella) está defendido por la 221 Brigada Mixta (EPR). Frente al ataque al ataque de la 84 División (Cuerpo de Enlace del Gral. Valiño) se ve obligada a retroceder a las cercanías de Castro. Al día siguiente realizada una contraofensiva que logra recuperar estas alturas y que consigue mantener hasta el día 11, viéndose obligados a retirarse desde la Femella y parte de la Mallasta a sus posiciones anteriores.


Plano de situación

Distribución de las unidades republicanas el 11.07.1938

Ante la dureza del combate también es relevada la 84 División por la IV de Navarra del General Camilo Alonso, permaneciendo en dichas posiciones hasta el 25 de Julio que debido a la ofensiva republicana del Ebro obliga a desplazar a ese frente, entre otras, las divisiones 84 y IV de Navarra.

Así pues y ese mismo día,  el 7ª Bon. de Carros, de la 55 División del Coronel Enrique Adrados releva a las tropas navarras situadas frente al Castillo de Castro que inmediatamente y en los día sucesivos comenzarían a fortificar la zona hasta que en la noche del 31 de julio al 1 de agosto, los republicanos inician a las cuatro de la madrugada un fuerte ataque (realmente hay que contemplar la zona actualmente para poder imaginar, conociendo el resultado,  la macabra escena y la dimensión de la tragedia) que resultó un gran fracaso, los franquistas con morteros, ametralladoras, fusiles y todo el armamento disponible desde sus trincheras y parapetos causaron un gran número de bajas entre los atacantes que debido a la orografía del terreno fueron “machacados” en la retirada.

Vista de la zona oriental de la Mallasta y la Femella, a la derecha la ladera del Castillo de Castro, lugar por donde se iniciaron las ofensivas republicanas 


No habiéndose conseguido por las tropas gubernamentales el objetivo señalado y a pesar del trágico balance, lo volverían a intentar el 12 de agosto, esta vez formaba parte de una gran operación del Alto Mando del EPR que diseñó dos ofensivas simultáneas: una en la Peña La Salada (Alto Palancia) y la que nos ocupa, ante la posibilidad de romper el frente y posterior penetración del ejército  sublevado.

La misión le es encomendada a la 190 Brigada Mixta, (15 División) al mando del Mayor de Milicias Fernando Garcés, con los cuatro batallones que la componen se le asignará el Batallón de Defensa de Costa nº 1, dos piezas antitanque y cinco morteros de la 57 BM con el objetivo de tomar las cotas 805, 606 y 608 que, una vez conquistadas, deberán ser fortificadas y defendidas.

Después de una preparación artillera, sobre las 15’30 se inicia el ataque por la infantería si bien las cosas ya empezaron mal, las dos piezas antitanque no habían llegado, una de las baterías artilleras estaba mal emplazada, el pelotón de transmisiones no estaba en su puesto, solo 2 morteros de la 57 Brigada fueron entregados,  toda una serie de errores, retrasos y deficiencias que presagiaban la catástrofe,  así fue. Todo el barranco y laderas se convirtió en un campo de muerte  y desolación.

La importancia estratégica de la cota 805, la 803 (posición 50) y 782 resultaba muy evidente y el 22 de agosto en una visita a la zona el General Aranda se decide la rectificación del frente a vanguardia con la ocupación de la cota 805.

Cota 805 (en la nomenclatura actual 806)



El asalto lo realizará el 9 Batallón de Carros (55 División) iniciándose a las 7 de la mañana con la preparación artillera durante 20 minutos siendo ocupada por los franquistas a las 7’30 ocasionando al enemigo 22 muertos, 7 prisioneros, bastante armamento entre el dos ametralladoras y munición. La ofensiva llega hasta la cota 801 (cota 52) lo que permite fortificar la cota 50 rápidamente, posteriormente, sobre las 10 son los republicanos los que baten con su artillería la zona alcanzando su máxima intensidad sobre las 14 horas, momento en que inician el contraataque, que si bien es rechazado obliga a retirarse de la cota 52, los combates duraran todo el día y  para agravarlo todo por la tarde se forma una fuerte tormenta que obstaculiza el aprovisionamiento y logística, no obstante las tropas de la 55 División logran conservar la posición a pesar de los ataques de las tropas gubernamentales y que continuaron el 26 y 27 de agosto ocasionando un coste de unas 200 bajas a los sublevados.


Vista panorámica realizada por el Cuerpo de Galicía en 1938, desde "El Sants de la Pedra", en el centro el Castillo de Castro y a la derecha "La Mallasta y Femella". 


Los combates en esta cota continuaron en días sucesivos y puntualmente en los meses siguientes y en consecuencia de ello el 20 de septiembre a las 12 horas en la posición 50 resulta herido el Jefe de la 2 Brigada de la 55 División el Teniente Coronel Salas  que fallecería durante su traslado al puesto de socorro junto con un Alférez y un Capitán (los Jefes de esta unidad solían visitar y permanecer muy a menudo la primera línea del frente).  A partir de este momento esta posición se la denominará “Posición Salas” entre las tropas franquistas.


Linea del frente en mapa de la época

No cabe duda que podríamos extendernos bastante sobre lo que ha acontecido en  una zona de combates muy duros y que se merecen dar a conocer, el hecho de estar sobre las trincheras semi enterradas, parapetos o refugios y rememorar estos acontecimientos aumenta nuestra admiración sobre todos los que estuvieron combatiendo.


Imponente el Castillo de Castro visto desde la cota 805


Después de un buen rato observando la zona llega el momento de descender, lo hacemos por la senda del Castillo de Castro en dirección a la “font de la Teula” y/o de “La Peñeta” en el mismo valle por donde atacaron los republicanos en las diferentes ofensivas que hemos comentado. El ascenso a la “Femella” nos completa el escenario bélico y otro descenso hacia la “Fonteta de Marc”, donde cogemos el vehículo que nos devolverá a La Vall d’Uixo.

Ha resultado una mañana espectacular, con una magnifica compañía, en un día espléndido, parajes mágicos de la Sierra Espadán, cargados con numerosa información de lo sucedido hemos conseguido tener una idea bastante detallada de lo que allí ocurrió en los meses de julio y agosto de 1938.

Una vez más nuestro respeto y recuerdo a todos sus protagonistas así como valorar la fortuna que tenemos de tener esta maravilla de la SIERRA DE ESPADAN.





Texto : Ernesto Zarzoso
Fotos: Fernando Nebot / Manolo Salvador/AGMAV
 
Fuentes:
La Batalla Olvidada/Juan Fco. Fuertes Palasí-Carlos Mallench Sanz
La Batalla por Valencia/Edelmir Galdon Casanoves.
AGMAV
Fondo documental MUNTANYES DE LA GUERRA


 

sábado, 17 de octubre de 2020

VISITA A LA PEÑA "LA MULA" (AYODAR-ESPADILLA). Por la ruta de los Guerrilleros de Espadán

Una de las actividades complementarias de nuestra Asociación es el senderismo, nuestra satisfacción es mayor cuando va asociado a la investigación del desarrollo de la Guerra Civil y si a ello sumamos que los hechos tienen lugar nuestra querida Sierra Espadán podemos decir que es completa.

 El 1 de mayo de 2019 tuvimos una gran experiencia fruto de haber conseguido el libro “Diez meses en el frente (1938)” de  Angel García de Jalón Lastra.  En el mismo nos documenta el diario de  Perfecto García de Jalón Hueto durante su estancia con la 108 División del ejército franquista por la Sierra Espadán y más concretamente en el término de Villamalur, lugares que con el libro en mano fuimos a visitar (esta actividad se puede consultar en este Blog  https://muntanyesdelaguerra.blogspot.com/2019/05/). 

                                                         

En esta ocasión es la publicación de Clemente González García “Espías y Guerrilleros en la Sierra de Espadán”  la que nos acompaña.

Compuesto por dos partes, la primera;  Investigación Histórica, en la que muestra las generalidades de las unidades de guerrilleros, primeras acciones guerrilleras en los frentes de Castellón y  la odisea que vivieron los cerca de 300 guerrilleros pertenecientes a la 300 División (Brigadas 155, 156, 157 y 232 del XIV C.E.) desde el 4 al 8 de agosto de 1938 con el cruce a líneas enemigas por Matet durante la noche del 4 al 5 de agosto con dirección a Villamalur, el combate en la Peña La Mula en Ayodar y el trágico regreso a sus puntos de partida.

La segunda parte muestra el trabajo de campo que le permitió ubicar en lugares exactos los acontecimientos complementado con unas magníficas fotografías y documentos cartográficos.

Con un ejemplar en la mochila, salimos antes del amanecer desde La Vall d’Uixò, Jose Antonio, Manolo, Fernando y Ernesto, en dirección a Espadilla en busca el inicio del PR- CV-386, sendero que nos llevará muy cerca de nuestro destino en la Peña “La Mula”.

El día amanece bastante fresco y con poco viento, lo que favorece la subida por la pista  “de los cazadores” donde comienza a clarear y nos permite poco a poco ir descubriendo el paisaje que como es de suponer es espectacular.

Mientras vamos comentando las incidencias de la marcha y el contenido del libro, tras un pequeño descenso nos presentamos en el “barranco del Melic”, en la que encontramos, en un bonito paraje, la fuente del mismo nombre, evidentemente se agradece un pequeño descanso, el correspondiente trago de agua y la foto de rigor.


                        Ernesto, Jose Antonio y Fernando en la fuente del "Melic"

Corral del Alto

Sin más demora y siendo conscientes que todavía nos queda mucho camino que realizar, continuamos, ya en plena ascensión, en dirección al “Corral del Alto”, donde nos detenemos unos breves instantes para tomar un pequeño descanso y poder observar la construcción que a pesar de estar en ruinas todavía se puede apreciar su espectacularidad.

 Sobrepasado el Corral del Alto, emprendemos el último tramo, bastante empinado y que nos conduce al Vértice Geodésico (831 m.s.n.m), lugar perfecto para abrir las mochilas, dar cuenta de los bocadillos, conversar y consultar el libro para situar los hechos.
Jose Antonio, Manolo y Ernesto en el Vértice Geodésico

Es en ese momento cuando comienza realmente nuestro rastreo por toda la cresta, desde el Vértice Geodésico hasta las inmediaciones de la Peña La Mula, localizando las trincheras, parapetos y cualquier tipo de construcción militar, no resultando fácil debido a la gran cantidad de matorral y vegetación existente.

Vista desde la Peña La Mula del Alto del Pinar y Sierra Espadan

   La Peña La Mula visto desde el Vértice Geodésico

Por su interés reproducimos parte del texto que  Clemente González incluye en su trabajo, “... El dispositivo de búsqueda se puso en marcha a las 8 de la mañana del día 6 de agosto (1938). Desde el amanecer los guerrilleros estaban detenidos, descansando a la espera de que llegara la noche para poder seguir avanzando.

A las 10’30 de la mañana y en las alturas situadas a unos 2.500 mts.  al noroeste de Ayódar, el escuadrón de Villarrobledo  del 6º Regimiento, que acaba de salir de dicho pueblo, descubrió a varias  patrullas de seguridad de los guerrilleros ocultas en la maleza...”

El avistamiento es comunicado  al Mando de la División 108 que ordena la intervención de la 4ª Cía para su desalojo, objeto que resulta imposible y ante la fuerte resistencia de los Guerrilleros es enviado el resto del Batallón, llegando al combate cuerpo a cuerpo.  A pesar del refuerzo, las tropas franquistas se ven obligadas a la retirada por lo que reciben el apoyo de los escuadrones del 5º Regimiento. 

El combate duró todo el día hasta que llegó la noche. Se incorporan dos compañías del 4º Bon. de Mérida para relevo de algunas unidades y por último el III Tabor de la Mehala del Rif, pero ya era tarde, la oscuridad de la noche permitió la retirada de los Guerrilleros a sus posiciones, regreso que se convirtió en un infierno, que como consecuencia dejó numerosas bajas entre muertos, prisioneros y desaparecidos. También tuvieron bajas  las tropas franquistas 13 muertos y 30 heridos del Batallón 202 de la 108 División y 6 muertos y 6 heridos del Escuadrón Villarrobledo.  

            Jose Antonio en uno de los parapetos construidos por las tropas franquistas en julio del 38 y que fueron usados por los guerrilleros para defenderse 

Conociendo la historia, el lugar impresiona, trasladarse en el tiempo, pensar en una calurosa mañana de agosto perseguidos por el enemigo con las provisiones limitadas, sin descanso con la amenaza continua de caer heridos, muertos o prisioneros, son situaciones que nos hacen reflexionar sobre la crudeza de la guerra  en la primera línea de fuego.

                    

                                     Verificando el parapeto de la foto del libro

 Para nosotros el enemigo es el tiempo, el largo trecho que nos queda para volver, nos obliga, muy a pesar nuestro, en tener que abandonar el lugar y comenzar el descenso.

Se nos ha quedado bastante territorio por ojear y quedamos en volver otro día para completar la visita por lo que nos volvemos a incorporar al PR  CV-386 para iniciar el descenso.

La espectacular Peña Saganta

Sin dejar de comentar todo lo que acabamos de ver y en una bajada relativamente cómoda con una magnífica vista de la Peña  Saganta nos presentamos el Corral Blanco, otro testimonio mudo de todo lo que paso allí en el verano del 38, sin detenernos llegamos a otro corral del “Tio Nebot” que a pesar del tiempo y el abandono todavía conserva parte del techo y unas arcadas que merecen la pena ver, eso sí con las debidas precauciones pues el estado ruinoso puede causar algún disgusto.

              

                    Corral del Tio Nebot

Entramos en la pista que bordeando la fuente “del Sastre” nos lleva al punto de partida que después de 5 horas y 13 kilómetros hemos completado en una estupenda mañana de octubre, por bellos parajes de la Sierra de Espadán y lugares donde todavía se pueden ver restos de lo que fue una gran tragedia motivada por una Guerra Civil que nunca debió de haberse producido.

Desde Muntanyes de la Guerra una vez más nuestro recuerdo y homenaje para todas la víctimas, especial a los que participaron en este combate de la "Peña la Mula" y a los lectores que  decidáis visitar la zona recordaros que fue un campo de batalla y como tal, es un Santuario, mucho respeto  por la memoria de los que allí cayeron y también por este inmenso jardín que tenemos el privilegio de poder disfrutar: LA SIERRA ESPADÁN.

                                 Ruta

Texto: Ernesto Zarzoso      12.10.2020

Fotos: Manuel Ballester/Fernando Nebot

Libro: Espías y Guerrilleros en la Sierra Espadan/Clemente González García  Ed. Pata Negra Cs2011

Mas fotos en:  https://photos.app.goo.gl/RifTkLjNYFXMT9Vi9